No alimente a sus mascotas con estos alimentos. Algunos ya los conoces y otros son menos conocidos.

Nueces de macadamia:
Mucha gente ha oído que las nueces pueden ser tóxicas o "malas" para los perros. La principal verdad al respecto es que las nueces contienen una gran cantidad de grasa y, por tanto, pueden causar malestar estomacal (gastroenteritis). Sin embargo, en el caso de las nueces de macadamia, existe en realidad una neurotoxina desconocida que puede causar depresión del sistema nervioso, náuseas/vómitos, aumento de la temperatura corporal y otros cambios neuromusculares. Las dosis tóxicas son de alrededor de ½ nuez por libra, pero varían. Si su mascota las consume, debe solicitar atención veterinaria.

Alimentos mohosos:
A veces, cuando los perros cogen un trozo de comida mohosa de la basura no es un gran problema. Sin embargo, otras veces puede causar gastroenteritis, pancreatitis o algo peor. Más allá de los signos comunes, algunos mohos contienen micotoxinas, concretamente micotoxinas tremógenas que, como su nombre indica, pueden provocar temblores. Más allá de los temblores y en función de la cantidad que hayan comido, los perros pueden experimentar convulsiones, temblores y ataxia. El tratamiento es de apoyo y se centra en la descontaminación y el control de las convulsiones/temblores hasta que los signos desaparezcan.

Ajo y cebolla:
Estas verduras pueden causar problemas importantes a las mascotas si se consumen crudas o incluso cocinadas como parte de un plato específico. Hemos visto dosis desde leves hasta potencialmente mortales. Una toxina específica que contienen provoca un daño oxidativo en los glóbulos rojos que conduce a su destrucción. En cantidades elevadas, las mascotas pueden necesitar transfusiones de sangre para mantenerlas hasta que su médula ósea pueda reemplazar las células destruidas. La gravedad de la anemia y el peligro dependen de la cantidad que hayan consumido.

Masa de pan cruda:
¿Hacer una pizza desde cero? Es mejor no dejar que tu mascota coma nada de la masa cruda. Si llega a consumirla, además de causarle hinchazón y malestar estomacal, puede causarle toxicidad por alcohol, ya que la levadura sigue reproduciéndose en su estómago. Recomendamos acudir de urgencia para inducir el vómito y, si es necesario, dar un tratamiento de apoyo.

Uvas/Raisinas:
Algunas personas suelen dar uvas a sus perros sin consecuencias. Sin embargo, nunca deberían hacerlo. Pueden provocar de forma idiosincrásica una insuficiencia renal que puede no ser reversible. No se sabe exactamente por qué ocurre esto, pero debido a la gravedad potencial de los signos, no hay una cantidad segura que deba darse a su mascota. Si consiguen consumir uvas o pasas, hay que inducirles el vómito y darles líquidos en el hospital durante 2 ó 3 días. Durante este periodo se comprueba diariamente la función renal y algunos valores de orina para asegurar que no hay signos de daño.

Autor: Dr. Edward Aller